14/07/2015
“Si hay una buena administración será más difícil que exista la corrupción”. Así lo ha asegurado este martes la Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, en el curso “El derecho frente a la corrupción”, de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en el que ha desgranado los elementos imprescindibles para alcanzar la buena administración y el buen gobierno.
A juicio de la Defensora, tres son los elementos necesarios: la transparencia, la función pública y el control del gasto.
Según ha explicado, la Ley de Transparencia (diciembre 2013) representa un avance importante y un “buen antídoto contra la corrupción” pues obliga a dar cuenta de cómo se gasta el dinero del contribuyente y a que los datos se expongan claramente. La transparencia también supone “responder a toda la información solicitada” por los ciudadanos.
La función pública también cumple un papel “primordial” en la lucha contra la corrupción, ya que son los funcionarios quienes deben verificar “si los actos se adecuan a la legalidad; no solo si hay capacidad para ellos, sino si los gastos o compromisos de pagos son acordes con la ley y tienen su correspondiente justificación”.
Soledad Becerril ha pedido que “se evite la creación de organismos, entes agencias, observatorios y consejos de toda clase que no resulten absolutamente imprescindibles” ya que, en su opinión, “una administración de grandes dimensiones no significa una mejor administración sino más centros de poder y, en muchos casos, mayores dificultades para el ciudadano”.
En tercer lugar, debe haber “un control del gasto mediante una legislación que ordene el funcionamiento de las administraciones y especifique los modos y maneras de administrar bienes públicos” y que establezca los límites permitidos y exija las autorizaciones correspondientes” ya que “en muchas ocasiones se han contraído compromisos sin respaldo financiero suficiente o sobre la base de presupuestos inflados por expectativas de muy dudoso cumplimiento”.
Delitos de odio
La Defensora ha manifestado que “en los últimos meses han aumentado las quejas por manifestaciones o expresiones de odio en las redes sociales” y ha advertido de que algunos comentarios pueden ser muy graves porque “tras la banalización de unos hechos lo que viene o vendrá, es el olvido”.
Por último, se ha referido a la decisión de la Audiencia Nacional de admitir la querella de la Asociación Dignidad y Justicia para investigar a ETA por delito de lesa humanidad. En su opinión, ello “abre una vía importante para poder juzgar no solo a los autores materiales de los crímenes sino también a sus autores intelectuales”.
Trabajo del Defensor
Sobre el trabajo diario de la Institución, Soledad Becerril ha mencionado la reciente puesta en marcha de la nueva página web www.defensordelpueblo.es, que da cuenta de todas las actuaciones, informes, estudios y documentos y que “facilita la presentación de quejas y los tiempos que unos y otros tardamos en las respuestas”.
Además, ha explicado que el Defensor del Pueblo “actúa ante las administraciones públicas, no contra ellas” y ha valorado la reciente ley que introduce los supuestos en los que una familia puede acogerse para evitar el desahucio y el Código de Buenas Prácticas firmado por la mayoría de las entidades bancarias.