Texto
Se ha recibido su escrito de respuesta a las conclusiones trasladadas como consecuencia de la visita al Centro Penitenciario de Segovia, a las cuales se hace referencia en el informe técnico adjunto.
Por lo que respecta a las conclusiones 6 (asistencia sanitaria 24 horas), 7 (inexistencia de un registro de demandas de asistencia médica programada) y 12 (servicio de interpretación), no puede compartirse el criterio de esa Secretaría General, por lo que, en virtud de lo dispuesto en el artículo 30 de la Ley Orgánica 3/1981, de 6 de abril, esta Institución ha estimado procedente formular las siguiente:
RECOMENDACIÓN
Adoptar, en todos los centros dependientes de esa Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, las medidas necesarias para que el idioma no suponga un obstáculo para la comunicación fluida entre los servicios sanitarios y los internos que demanden atención, con el fin de garantizar que la misma se lleve a cabo de forma correcta, sin errores achacables a la comunicación y sin afectar a su intimidad, como por ejemplo a través de servicios de interpretación telefónica, conforme a lo recogido en el parágrafo 80 del Informe Anual de 2012 del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, (en lo sucesivo MNP).
SUGERENCIAS
1. Adoptar las medidas necesarias para que el Centro Penitenciario de Segovia disponga de asistencia sanitaria médica presencial durante las 24 horas del día, conforme a lo señalado en el parágrafo 83 del Informe Anual 2012 del MNP.
2. Habilitar un libro de demandas de asistencia médica programada en el Centro Penitenciario de Segovia, para evitar la pérdida o alteración de alguna de las hojas de consulta que se emplean actualmente, de acuerdo con el criterio de esta Institución manifestado en el parágrafo 87 del Informe Anual 2012 del MNP. Agradeciendo la colaboración que presta a esta Institución, y esperando la contestación oportuna respecto a la Recomendación y Sugerencias formuladas, así como a la información solicitada en el informe técnico adjunto.
Le saluda muy atentamente,
Soledad Becerril
Defensora del Pueblo